Una forma legítima de expresión artística.
A medida que el arte callejero continúa evolucionando y ganando reconocimiento como una forma legítima de expresión artística, es importante que la sociedad tenga conversaciones abiertas sobre su función.
El arte callejero es una forma de expresión artística cada vez más popular que se ha convertido en una herramienta poderosa para el comentario social y político.
Desde murales hasta grafitis, el arte callejero se ha convertido en una forma de que los artistas comuniquen su mensaje en los espacios públicos, llegando a un público más amplio que si exhibieran en galerías de arte tradicionales.
Sin embargo, el arte callejero aún enfrenta desafíos en términos de legitimidad y legalidad. Muchas personas ven el arte callejero como vandalismo, y algunos artistas han sido arrestados por su trabajo.
A pesar de estos desafíos, los artistas callejeros continúan superando los límites y creando piezas que invitan a la reflexión y desafían las normas sociales. El arte callejero también puede servir como un medio para revitalizar los espacios urbanos y llamar la atención sobre las áreas abandonadas de la ciudad.
Además, el arte callejero tiene el potencial de generar conversaciones importantes y unir a las comunidades a través de experiencias compartidas. Es importante tener en cuenta que no todo el arte callejero se crea de la misma manera, y algunas piezas pueden cruzar la línea hacia un territorio ofensivo o inapropiado.
En general, el arte callejero es una forma importante de expresión artística que debe reconocerse y celebrarse por su capacidad para provocar el pensamiento, unir a las comunidades e inspirar el cambio. Como con cualquier forma de arte, el arte callejero tiene el poder de evocar emociones y estimular la conversación.
Sin embargo, es crucial que los artistas callejeros sean conscientes de su impacto en la comunidad y respeten los límites de la propiedad privada. En conclusión, el arte callejero es una forma de arte compleja y multifacética que tiene el poder de desafiar, inspirar y unir comunidades.
Ya sea una etiqueta simple o un mural elaborado, el arte callejero tiene el potencial de tener un impacto duradero en quienes lo ven.
A medida que el arte callejero continúa evolucionando y ganando reconocimiento como una forma legítima de expresión artística, es importante que la sociedad tenga conversaciones abiertas sobre su función.
Pintores Urbanos Street Art
Este dibujo realizado con esténcil es una síntesis perfecta. Así como se muestran, sucias y descascaradas, estas paredes Argentinas abarcan en ellas los movimientos de Street art más activos de América latina.
Un brasileño apodado Flip, aprovechó la escala de un crucero para bajar del barco y pintar en Buenos Aires. Llegan artistas de toda América y Europa como él para convertir estos muros en un museo al aire libre. Sin recibir nada a cambio, trabajan en equipo con sus pares locales, que cada año viajan para demostrar sus trabajos en galerías y festivales del exterior.
Consciente de su poder de seducción, Argentina se maquilla para la foto mientras el arte urbano desfila por la alfombra roja de Hollywood: Banksy, el artista callejero más famoso del mundo, llego hasta los premios Oscar, seis meses después de que los grafiteros tuvieran su primera bienal, Grafiti Fine Art, en San Pablo.
Buenos Aires no está dispuesto a resignarse al segundo plano. Por eso no dudó en darle vía libre a Sigismond de Vajay, curador de la muestra Of Bridges & Borders en la Fundación Proa, para que Sabina Lang y Daniel Baumann intervinieran el puente que une la Facultad de Derecho de la UBA con el Museo Nacional de Bellas Artes. La obra fue presentada un mes antes de que el grafitero parisino Jonone pintara en vivo durante la «Noche en vela», organizada junto con el gobierno francés, en la mítica calle Lanín, en Barracas.
«El street art fue un importante aporte a la ciudad porque le dio una vuelta de tuerca al clásico grafiti derivado del hip hop; amplió sus límites», dice Marino Santa María, quien fue el responsable de haber transformado con venecitas de color, estas cuadras que hoy son un imán para el turismo. Hace diez años cuando el comenzó a trabajar allí, esta ciudad era un caos. Una mañana aparecieron el Cabildo, la Catedral metropolitana y la Plaza de Mayo pintadas con aerosol: «Que se vayan todos».
Teatro callejero.
El principio del teatro callejero va desde la antigua Grecia, donde los viajeros llegaban a la ciudad de Atenas y contaban sus aventuras de viaje. Ahora en la actualidad estas obras se llevan a cabo en casi todas las ciudades del mundo llevando el teatro a las calles como expresión.
Varios siglos más tarde se siguió con la costumbre callejera con la llegada de compañías de circo, trovadores y músicos que optaban por actuar en las plazas y calles de las ciudades.
Este arte es una expresión de cultura que se creó con el fin de acercar el teatro al pueblo, esto fue favorable ya que la sociedad no tenía que pagar una entrada para ir al teatro.
En un lugar diferente sin la estructura de un teatro convencional este arte ha sabido ganarse su especio en muchos países.
Las obras de teatro callejero siempre son diferentes a la de los teatros convencionales
Las actrices y los actores son profesionales de esta ideología que eligen este tipo de obra para compartir ideologías que se trasmiten atreves de estas obras populares.
Uno de los beneficios que tiene el teatro callejero es que cualquiera puede presencias estas obras.
Existe mucha variedad de teatro callejero como: teatro infantil, clásico, danza, opera, etc.
Actualmente en Buenos Aires cada año en el teatro callejero se presentan grupos de todo el país, para exponer sus obras en la calles.
Sin embargo en Bogotá existen gran cantidad de grupos de teatros callejeros habiendo incluso un festival iberoamericano que lleva ya 11 ediciones con gran éxito de público y gran cantidad de participantes.
Los magos callejeros
La magia en las calles siempre ha formo parte de la vida del hombre desde el principio de su existencia de alguna forma u otra.
En sus inicios ha sido un aspecto fundamental de lo misterioso y lo religioso y muchos hechos naturales eran considerados magia por el hombre, señal de los dioses. La magia es una de las artes más antiguas que se conocen, se tiene conocimiento desde el año 1700 A.C., ya en la Biblia encontramos referencias a ella, todos recordamos como Moisés convirtió su báculo en una serpiente delante del mismo rey de Egipto. La magia comenzó a crecer por las calles, plazas, en centros de reunión. Según algunos autores le denominaban «Magnus» a un sacerdote de los medas de ahí el nombre de magia. Otros autores dicen que el término magia deriva de magi, uno de los elementos religiosos incorporados por los magos en la antigua Babilonia. Hubo magos en Roma, donde se les llamaba «Acetabularius» aquel que hacía trucos con vasos y bolas. La magia y la hechicería estaban ligadas también a las creencias de pueblos orientales muy antiguos, en los que el mago o chamán era a la vez un sanador y un conocedor del mundo invisible de los espíritus y desempeñaba un papel preponderante en la comunidad.
En la Europa medieval la magia estuvo relacionada con la alquimia y la astrología, actividades ocultas consideradas demoníacas por la Iglesia Católica, y que fueron objeto de persecución especialmente durante la Baja Edad Media y la Era Moderna.
La adivinación mediante el Tarot fue una actividad frecuente en el nacimiento de la Era Moderna y los sistemas de símbolos desarrollados por los cartománticos para el conocimiento de la realidad presente y futura son claramente deudores de otros métodos de adivinación practicados por los magos, entre ellos la lectura del vuelo de las aves y de las entrañas de los animales sacrificados.
El mimo, tal vez, el arte mas callejero.
El origen de los mimos se remonta al tiempo de los griegos y los romanos, en el Mundo Antiguo.
El mimo se expresa a través de gestos a lo cual renuncia a todo tipo de sonidos y lenguaje hablado, esta es una forma de expresarse artísticamente.
El mimo pretende expresar una historia sin ningún tipo de lenguaje hablado, su idioma y sus palabras son los movimientos que el realiza, se manifiesta atreves del lenguaje corporal.
La palabra MIMO proviene de “pantomina” que en griego significa que imita todo, utilizando la mímica se comunica y está relacionado con la danza y las artes.
En todas la ciudades del mundo podemos encontrar un mimo, por lo general trabajan solos, estos personajes suelen utilizar accesorios o alguna pintura en el rostro para imitar algún personaje.
No importa de clase social venimos o la edad que tenemos, siempre nos llama la atención verlos actuar, muchas veces imitan estatuas, a veces realizan coreografías, y todas ellas logran llevarnos a un mundo irreal de fantasía.
Existen en todo el mundo muchos mimos famosos, siendo el más importante en toda la historia Charles Chaplin y Marcel Marceau.
El arte callejero, una nueva forma de hacer turismo.
Se puede definir al arte callejero o arte urbano como todo el arte expresado en la calle normalmente de manera ilegal o como una forma artística de intervenir el espacio público.
El arte callejero en Argentina comenzó a consolidarse en los años 90 gracias a la llegada de artistas extranjeros y algunos argentinos que habían aprendido a hacer graffiti en Europa o Estados Unidos.
La creación de murales y graffiti en Inglaterra, Estados Unidos y en otros países de Europa está prohibida, es por eso que Buenos Aires ha sido cuna para diversos artistas, cada uno con una diferente forma de expresión. Ahí, en lugares en decadencia, edificios y casas abandonadas, espacios públicos degradados, es donde los artistas callejeros logran plasmar su arte y revivir los barrios de porteños.
Marina Charles, es una inglesa que al mudarse a Buenos Aires pudo notar el arte latente de la ciudad, crear su empresa Graffitimundo y construir una propuesta distinta: un recorrido turístico por los principales barrios de la ciudad donde se puede apreciar el arte de distintos artistas, contactarse con ellos y comprar sus obras.
“Hace 8 meses estuve viviendo en Buenos Aires con una amiga, aprendiendo castellano y buscando trabajo. Nos encantó el arte callejero de la cuidad y quisimos hacer un tour pero cuando nos dimos cuenta de que no había nada como esto, decidimos empezar nuestra empresa”, explica Marina Charles.
En Londres Marina trabajó con artistas urbanos, ilustradores y diseñadores, pero siempre notó que existía una mirada negativa hacia el arte callejero. “En Argentina los artistas tienen la libertad para pintar donde quieren de una manera relajada, algo muy distinto en relación a otro países donde el arte urbano está prohibido”
El objetivo de Graffitimundo es promover los trabajos de los artistas argentinos en su país y en el mundo, mediante un recorrido por los barrios de Palermo, Belgrano, Colegiales y San Telmo, donde se pueden apreciar los graffitis y murales que se esconden detrás de la ciudad que estamos acostumbrados a ver.
Al igual que Graffitimundo existen otras organizaciones que intentan promover el arte urbano en Buenos Aires. Este es el caso de Hollywood in Cambodia, una galería de arte callejero ubicada en Thames y Costa Rica, Turbo Galería en Costa Rica al 5800, Loveyou y Sixfeet, dos tiendas en Palermo que venden piezas de arte, indumentaria y accesorios y Diente de Oro, un espacio que brinda la posibilidad de realizar talleres de arte urbano.
Si bien Graffitimundo es la única empresa en el mundo que promueve el Street Art desde una mirada turística, Inglaterra cuenta con dos espacios que posibilitan la promoción del arte callejero, Ektopia y Pure Evil. Así también Estados Unidos cuenta con Wooster Collective, una página de Internet que promueve las obras de varios artistas en Nueva York, Fecal Face, una tienda de San Francisco que vende piezas de artistas de todo el mundo y Unurth en Los Ángeles.
Malabarismo el Arte en las Calles
En una mano la herramienta del arte y la de las ciencias sociales y en la otra es posible llegar a comprender una sociedad, vivir en carne propia y después de pensar en cambiarla de alguna manera, generando así todo un proceso de identidad y organización “desde abajo”.
Comenzando de esta idea, un grupo de colegas de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) de antropología, unidad Iztapalapa, y alumnos de diversos planteles de bachillerato, decidieron reunirse para hacer del malabarismo callejero una forma de subsistencia alternativa, pero también una estrategia de intervención en los barrios populares.
Se trata del Colectivo, que desde hace un par de años se ha dedicado a cultivar el arte callejero en explanadas y espacios abiertos de la delegación Iztapalapa, como la salida del teatro Quetzal, donde llamado la atención de las personas de la zona.
Aunque para la mayoría el inicio en los malabares se dio de una forma más bien circunstancial, ahora esta actividad les ha permitido no sólo ganarse un poco de dinero, sino también ejercer la antropología “en el terreno”, de manera directa, contrastando la teoría con la realidad que ven cotidianamente en los semáforos.
“Todo surgió por la inquietud de hacer talleres con la gente del barrio. Yo, por cosas del destino me hice unos “gol-os” y a partir de ahí me nació el gusto por hacer esto, con lo que podemos salir del ámbito de la secundaria”
Y a través de lo que aconteció cada vez más colegas de mi barrio se unieron en un conjunto de malabarismo callejero.
GRAFITI ARTE CALLEJERO
El grafiti nace como un arte ilegal, por realizarse en propiedades privadas, el que se dedica a escribir grafitis no es un criminal, ni drogadicto, a pesar de los peligros que corren, ya sean multas y cárcel, continúan con su necesidad de expresarse.
El grafiti apareció en Nueva York y está representando un medio para expresar culturas, políticas y sociedad. Este ha sido adoptado por jóvenes en todo el mundo, hoy por hoy se considera una manifestación estética urbana.
Desde su aparición ha sido determinado como una identidad vandálica, y ha impactado en varias partes del mundo. El grafiti y su estilo se ha desarrollado como una forma de expresión artística y cultural.
El entorno urbano es capaz de ser modificado por esta actividad. El escultor Santiago Baeza Sánchez indica que “el grafiti ha dado pie a obras que han llegado a configurarse en su entorno caracterizado por ser efímeras”.
Se considera que el grafiti es un arte temporal ya que tiene una vida limitada y este carácter provisional es el que lleva a los “writers” a intentar exhibir por medio de fotos sus trabajos, y también el principal motivo que ha llevado a la actual proliferación de revistas tanto impresas como on-line sobre este arte urbano.
En los países de habla hispana este arte callejero ha sido un elemento fundamental para la resistencia política. En España se ha dado como medio para el rechazo de la dictadura, en América latina se hace para luchar contra las dictaduras militares que invadieron el continente, se consideraba que las paredes era el mejor medio para plasmar algunas consignas sobre la resistencia de la calle al poder.
A pesar de que en Estados Unidos existió como una herramienta política, principalmente lo utilizaban las bandas para marcar su territorio.
Una manera de decir “esta calle es mía” o “esto me pertenece”
EL ARTE DEL PAYASO CALLEJERO
Ver a un payaso cruzar una avenida, detener el paso de microbuses y automóviles con un caminar desenfadado y resuelto -como ejerciendo un derecho de soberanía sobre el mundo, interrumpiendo la ley del tránsito sólo como un ejemplo (su entrada en escena) de su permanente subversión de toda norma, de toda ley, de toda normalidad- es ver un acontecimiento fundamental, denso, trascendente. No se trata meramente de una expresión folklórica, una visión melancólica de una cultura popular que retrocede ante el amenazante avance de la cultura de masas y de la farándula nacional. Hay algo serio en la risa que provoca el payaso, genera una fascinación (placer y displacer); se le teme y se le busca: es una figura inevitable. ¿De qué se trata la experiencia del payaso? ¿De qué se trata esta experiencia para el espectador, de qué se trata para el payaso?
Según Gabriel Weisz, “el clown opera con mensajes opuestos y disociaciones porque así provoca un estado de caos conceptual. Digo que el clown es caótico en tanto que contradice una supuesta situación de normalidad. En tales situaciones usualmente creemos predecir la conducta de las personas que nos rodean por lo cual no suelen sorprendernos. Pero el clown no entra en estas categorías y justamente su objeto es romper con nuestros modelos mentales arraigados a un mundo hecho a la medida de nuestras convenciones. Al romper con las categorías nos sorprende y esperamos que lo haga para poder alimentar nuestra existencia con otros modelos mentales a los que estamos habituados. Cuando presenciamos todo lo que puede simbolizar inconsistencia, entonces perdemos el control. Los diferentes sistemas de poder que gobiernan nuestras sociedades nos educan en las reglas de la consistencia, por ello el humor es el peor enemigo de las dictaduras que buscan en la consistencia la manera de implantar el poder. El clown rompe con esa línea de significados hipnóticos entre el buen ciudadano y el poder; en este sentido es la fuerza rebelde, el azar y el caos.
EL ARTE DE LA MUSICA CALLEJERA
La música callejera se ha establecido como una categoría dentro del arte callejero. Su autor pueden ser tanto una única persona como un grupo formado por varios cantantes, e instrumentistas. En algunos casos también se acompañan de pequeños aparatos de música como música de fondo. Se colocan en las calles y nos presentan sus canciones pidiendo a sus espectadores monedas que suelen recoger en sombreros, cajas u otros utensilios.
Por ejemplo en Costa Rica la música está representada por expresiones musicales como la parrandera, el tambito, el vals, el bolero, la cuadrilla, el calypso, el chiquichiqui, el mento. Todos ellos surgidos de los procesos migratorios y los intercambios históricos entre indígenas, europeos y africanos. Algunos instrumentos típicos son el quijongo, la marimba, las ocarinas, el bajo de cajón, el sabak, las flautas de caña, el acordeón, la mandolina y la guitarra.
Características y Géneros
En su forma más generalizada, la música latina se corresponde a los bailes y músicas populares originarios de América latina o que simplemente son interpretadas en español.
Aceptando la definición popular, se puede decir que existen diversos estilos de música latina en el continente americano, En los cuales predomina en diferente grado elementos musicales europeos, africanos o indígenas. En el pasado, varios autores habían sugerido posiciones extremas, como que la música latina está privada de la influencia africana, o por el contrario, que es puramente africana y carece de elementos indígenas y europeos. Hoy en día, está generalmente aceptado que los ritmos latinos son sincréticos. Específicamente, las formas españolas de composición de canciones, los ritmos africanos y la armonía europea son partes importantes de la música tropical latina, así como de los géneros más…